¡Hola de nuevo!

Hoy este post se lo dedico a todas aquellas novias que sueñan con que llegue el día de su boda. 

Seguro que muchas de vosotras os habéis imaginado qué sentiréis al despertar... si estaréis nerviosas, asustadas, emocionadas, ilusionadas... Es como para una niña cuando, por primera vez, sus padres la llevan a Disneyland. Seguro algunas reconocéis y recordáis esa sensación... de no poder dormir y contar las horas que faltan para levantaros y empezar el gran día.

Pues bien, ahora imaginaros abrir los ojos desde la cama y ver, tras una puerta entre abierta, aquello que ansiabas ponerte desde hacía meses, aquello que has buscado tienda tras tienda, lo que te transformará en princesa por un día... El vestido, tu vestido.

Os presento el abrir de ojos de ese gran día para Esther...

P.D.: Próximamente os mostraré el vestido completo y dónde lo consiguió.